lunes, 22 de febrero de 2010

Cuando se apunta a la Luna, el tonto se queda mirando al dedo

Nos piden moderación en todos los ordenes de la vida, tanto en la conducción, en la alimentación, en el consumo de bebidas, en definitiva se impone un “echar el freno”. Consecuencia de lo anterior se nos pide ahora un nuevo esfuerzo y se solicita moderación salarial, moderación a la hora de hacer uso de los servicios públicos, moderación en las expectativas de jubilarnos... Con la entrada en el Siglo XXI se ha introducido un nuevo paradigma: “decelerar” lo más posible, y todo esto tras un siglo anterior de vértigo, locura y frenesí. El túnel de aceleración de partículas se queda sin fondos, se pretende rebajar a la mitad la velocidad de la luz o se vuelve al localismo frente al expansionalismo de la universalización de derechos. Bien cada uno que ponga su parte proporcional pero ¿Qué parte pone la que maneja el “maquinillo”?, ¿Dónde están las contribuciones de quienes en la época de voraz capitalismo rebosaron en beneficios y extravagancias?Desconozco de donde procede esa inamovible necesidad de los partidos socialdemócratas por hacer todo lo posible para mantener el llamado “status quo” y el orden preestablecido. Si Ebert salio por la puerta falsa de la historia, Zapatero hace todo lo posible por salir por la puerta de la vergüenza. Ayer Aznar saco un dedo, mañana, y es lo más preocupante, ya veremos.

1 comentario:

Álvaro Dorian Gray dijo...

Te dejo la página donde puedes, a modo de desahogo, sacarle el dedo a Ansar:
http://www.devuelveelsaludoaaznar.com/

Saludos y salud compi