miércoles, 12 de noviembre de 2008

ZP se va de after

La mano invisible del mercado alcanza ya categoría épica, solo comparable a la que mi madre utilizaba para amedrentarme para terminar la comida en mis ya lejanos años de infante (¡qué viene la mano negra!, no confundir con la inefable banda de bandoleros que operaron en la provincia de Cádiz allá por principios del siglo XX). Que en el “after” que han preparado a Bush para el próximo “finde” se reúnan todos los que la han liado para echar las culpas a esos malditos obreros por mantener esa lujuriosa pretensión de comer langostinos las próximas navidades pase, pero que sigan insistiendo en su falta de liquidez para abordar su próxima presencia en los GP de automovilismo parece que fastidia, si no que pregunten a los compañeros de Nissan. En la Comunidad de Madrid hay una mano, bien visible, que se mimetiza con la acción de gobierno, legítima, del Gobierno de Esperanza Aguirre. Pero de propiedades fuera de lo común al estilo x-men o women, nada de nada, res de res por aquello del bilingüismo. Por privatizar, la mano que mece la cuna, hasta la banca le temen, si no sigan con detenimiento las maniobras orquestales en la oscuridad (O.M.D.) que se realizan en torno a Caja Madrid. Lo que no deja de ser curioso es la actitud, que no aptitud, del flamante Secretario General del PSM, Don Tomás Gómez, en pro de no se que estabilidad y responsabilidad del demonio (permitan que haga alusión a nuestro patrocinador general de las propuestas de izquierdas). Hasta la derecha, eso sí la racional, propugnan una subordinación de la economía a la Política, a la Ética, e incluso a la Estética. Compañero Tomás. ya que he recurrido al demonio. ahora tirare del Nuevo Testamento: “una palabra tuya bastará para sanarme”. Por lo menos cuando salga en televisión “Pepiño” que no pensemos ¡Qué habrá hecho Tomás!. A ver si algún compañero con mano en la vida y milagros del Atlético dedican al anfitrión aquello de cuando expulsan algún jugador del equipo rival “Adiós....” Yo se lo agradecería. No confundir el simpatico animal que ilustra este humilde post con "bambi", tampoco visione la pelicula Disney por su violencia explicita.

No hay comentarios: