Ya me imaginaba que entre tanto futbol algo nos meterían de rondón. El pobre de Paul es la excusa perfecta para meternos la del pulpo. Con la brillante idea del Presidente Zapatero de privatizar las cajas, cierra el círculo iniciado con el rescate de la banca privada con el ofrecimiento a modo de mejillones del último reducto público en la intermediación de los mercados financieros y crediticio que quedaba en España (en este caso no la roja que sí la azul).
No es de extrañar que el PP ante el bodrio presentado de Reforma Laboral se haya abstenido, aquí no hay fisuras, la campaña electoral se acerca y las necesidades crediticias no son pocas.
Mientras los compañeros del Metro reanudan su reivindicación laboral, los medios de comunicación pontifican que no cuentan con el beneplácito de la opinión pública, que ya sabéis que es la peor de las opiniones. Ayer un millón (¿?) homenajeando a la selección y todos los focos mediáticos en el aquelarre. Cinco millones de parados y ningún despliegue mediático. Busquen, comparen y si encuentran algún producto más liberal vótenlo.
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